La vida, del gran porcentaje de la población mundial, se basa en lograr metas propias que nos trazamos. Sin embargo, muy pocas personas establecen pequeños hábitos diarios que nos permita mejorar nuestro estado de ánimo.
Conseguir el ascenso soñado, mudarnos de casa, ahorrar cierta cantidad de dinero, lograr el título profesional que tanto soñamos e incluso vivir una vida fitness, son los grandes objetivos que nos trazados para nuestra vida. Pero, ¿Dónde queda nuestra salud mental diaria y la manera como nos sentimos en el camino para lograr esos sueños?
A continuación te brindamos algunas prácticas de rutinas diarias que te permitirá mejorar, poco a poco, tu estado de ánimo.
La manera en como despiertas influye directamente el desarrollo de tu día. Olvídate que lo primero que debes hacer al despertar es mirar tu teléfono celular. Aprovecha esos primeros minutos de tu día para estirarte, respirar profundamente y agradecer por una nueva oportunidad para lograr tus metas.
Esas pequeñas acciones cambiarán la mentalidad de tu nuevo día, dejarás de lado esa sensación de estrés o de querer hacer todo a contratiempo.
Tan solo necesitas dos minutos de tu día para este pequeño pero poderoso hábito. Inhala profundamente contando hasta cuatro, retén el aire por un par de segundos y luego exhala lentamente contando hasta seis.
Aunque no lo creas, al realizar esta practica, estás regulando tu sistema nervioso, reduciendo la ansiedad y mandándole a tu cuerpo ese mensaje de calma de manera inmediata. Lo ideal es que puedas realizarlo al despertar, antes de cada reunión o examen que te produzca mucho estrés y antes de finalizar tu día.
Aprende a agradecer por todo lo que te rodea, así para ti ya sean cosas muy cotidianas, como tomar un café caliente, charlar con tu amigo o incluso caminar.
El agradecer constantemente, te permitirá entrenar tu mente para enfocarte en lo positivo, cambiará tu perspectiva y te enseñará a disfrutar lo que tienes a tu alrededor.
Evita siempre el sedentarismo, no le es bien ni para tu cuerpo ni para tu mente. Si tus obligaciones del día a día no te permite ir al gimnasio o realizar ese deporte que tanto te gusta, dedícale 15 minutos al día a caminar, bailar tu canción preferida, hacer algún tipo de deporte que exija mover tu cuerpo. Estos estiramientos puede liberar endorfinas, las hormonas relacionadas con la felicidad.
Además, ten presente que el estiramiento es una manera natural de liberar tensiones musculares y de despejar la mente.
Es importante que te aprendas a desconectar de la realidad digital que nos rodea en todas partes. Separa, entre 20 a 30 minutos al día para realizar alguna actividad que no demande tener una pantalla frente a ti, como leer un libro, dibujar, cocinar o simplemente mirar a tu alrededor.
Este espacio sin pantallas reducirá la sobreestimulación que producen estos equipos digitales, permitiéndote de esta manera mejorar la concentración y brindar una sensación de calma a tu mente.
Está bien que te enfoques en lograr grandes metas, pero no dejes de lado tu estado de ánimo durante el proceso para lograrlo.
Tu salud mental, al igual que tu salud física, es muy importante para el desarrollo de tus obligaciones diarias y cuidar de ella, permitirá que todo te fluya de una manera más natural.
La clave siempre será la constancia en cada nuevo hábito que establezcas en tu vida, con el pasar de los días, lograrás ver los cambios positivos.
