

Las vitaminas y los minerales son esenciales para que nuestro organismo funcione correctamente. Estas son adquiridas, principalmente, en nuestra alimentación.
Sin embargo, estilos de vida actuales, donde se consumen productos ultraprocesados, además del estrés y algunas condiciones médicas, pueden provocar que no siempre obtengamos los nutrientes suficientes.
Detectar a tiempo la insuficiencia de vitaminas y minerales, podría ayudar a prevenir algunas enfermedades.
Estas deficiencias se dan cuando el organismo no absorbe la cantidad necesaria de nutrientes. Son varios los factores que pueden influir, como una dieta inadecuada, problemas de absorción intestinal, consumo prolongado de ciertos medicamentos e incluso algunas etapas de la vida, como el embarazo, la lactancia, la adolescencia y la vejes.
La falta de vitaminas y minerales puede afectar el sistema inmune y la salud ósea.

Cada vitamina y mineral cumple con una función específica en nuestro organismo.

Los síntomas anteriores deben ser una señal de alerta para que acudas con tu médico de confianza y a través de un análisis de sangre, evaluación clínica o historial dietético, se determine si estás presentando o no deficiencias en vitaminas y minerales.
Es importante que evites los autodiagnósticos y la automedicación, porque consumir suplementos sin supervisión médica, puede causar toxicidad y desequilibrios.
La clave siempre está en tu alimentación y estilo de vida.

Ten presente que la deficiencia de estos nutrientes, en algunas oportunidades, no causa efectos inmediatos. Por esta razón, debes ser muy cuidadoso de qué consumes. Recuerda que una buena alimentación es el combustible para que tu organismo funcione perfectamente.