Las mascarillas nutritivas son el aliado perfecto para lograr un cabello saludable, brillante y fuerte, bien sea porque tu cabello necesita recuperarse o para mantenerlo hermoso.
Los radicales libres, el uso de tintes, decolorantes, procesos químicos como los alisados y el uso de calor para secar o planchar el cabello, terminan por deteriorarlo, perdiendo su brillo, fuerza y convirtiéndolo en un cabello poco saluable.
Por eso, es muy importante que, así como cuidas para que tu tono esté perfecto, sin raíces; o cuidas que tu cabello esté perfectamente liso, también dediques tiempo a nutrirlo.
Las mascarillas nutritivas, bien sea naturales o productos cosmetológicos, son tratamientos intensivos creados para penetrar la fibra capilar e hidratarla. No es un acondicionador común, pues este producto actúa de manera superficial. Las mascarillas nutritivas contiene ingredientes activos que le aporta una hidratación profunda a tu cabello, como aceites, proteínas, vitaminas y extractos naturales.
Una mascarilla nutritiva es alimento para tu cabello, es un rescate intensivo que fortalece la fibra capilar, desde la raíz hasta las puntas, evitando incluso la caída y estimulando el crecimiento de nuevo cabello.
Ten en cuenta que, a la hora de consentir tu cabello con una mascarilla nutritiva, debes tener muy en cuenta tus necesidades. Es decir, ¿sufres de cabello quebradizo? o lo que buscas es reducir el frizz o por el contrario, ¿necesitas estimular el crecimiento y prevenir su caída?.
Basado en las necesidades de tu cabello, opta por usar mascarillas nutritivas con ingredientes que te ayuden a solucionar tu problema:
Antes de aplicar tu mascarilla nutritiva, identifica tu necesidad y por ende, los productos a usar. Una vez elegida la mascarilla nutritiva, lava muy bien tu cabello para eliminar las impurezas y abrir la cutícula capilar. Retira el exceso de agua con una toalla y aplica la mascarilla de medios a puntas, sobre todo tu sufres de cabello graso. La recomendación de expertos siempre es distribuir el producto con un peine de dientes anchos, esto te garantizará una aplicación más uniforme.
Déjala actuar por 20 minutos o según las indicaciones del fabricante y enjuaga con abundante agua fría, esta temperatura le ayudará a tu cabello a sellar la cutícula y conservar la hidratación.
Este proceso debes realizarlo una o dos veces por semana si tu cabello está seco y muy maltratado. Si tienes un cabello normal, aplícate una mascarilla nutritiva una vez cada 15 días y si tu cabello es muy graso, realízala al menos una vez al mes, pero aplicando el producto solo en las puntas.
Recuerda consentir tu cabello, para lograr una melena que robe miradas.