

La joyería o accesorios que llevas puestos, son uno de los elementos más importantes a la hora de complementar tu outfit. Un buen collar, unos hermosos aretes o un anillo bien elegido, podrá elevar, visualmente tu look, haciéndolo lucir más elegante o interesante.
Sin embargo, si no usas las piezas adecuadas o no las sabes combinar correctamente, puede que el resultado sea un look recargado y con falta de armonía.
Lo ideal es que aprendas a usar joyería con equilibrio, pues esa siempre será la clave para lograr un estilo limpio y muy bien definido.
Ten siempre en cuenta que no es necesario usar todas las piezas de joyería al mismo tiempo. Puedes optar por elegir uno o dos accesorios protagonistas y con ellos será suficiente.
Por ejemplo, si tus aretes son llamativos, lo ideal es que el resto de los accesorios que lleves sean discretos o incluso, tomes la decisión de no llevar más joyas puestas. De esta manera, la atención la atraerá los lindos aretes que estás luciendo y así tendrás un look más ordenado.
Nunca te olvides que la joyería es para complementar tu ropa, más nunca para competir con ella. Es decir, si tu ropa es el centro de atención, porque llevas estampados, colores intensos o muchos detalles, opta por una joyería sencilla y delicada.

Mientras que si tu outfit es básico, o monocromático, apuéstale a llevar esos accesorios llamativos que tanto te gustan, para que sean estos los que llamen la atención.
La proporción de tu cuerpo o tus características físicas también son muy importantes a la hora de crear tu look.
Las personas de complexión pequeña suelen verse mejor con joyas finas y ligeras, mientras que las piezas muy grandes pueden resultar abrumadoras. Del mismo modo, si usas collares largos y voluminosos, es recomendable evitar aretes demasiado grandes para no saturar la parte superior del cuerpo.
Mezclar demasiados estilos, metales o tonos puede generar un efecto desordenado. Elegir joyería del mismo color, como dorado o plateado, ayuda a crear un look más armonioso. Si decides mezclar metales, hazlo de forma intencional y equilibrada, usando piezas similares en estilo y tamaño.

La joyería o accesorios que llevas puestos siempre deben reflejar tu personalidad, tu estilo, tu autenticidad. No optes en usar un accesorio que está de moda si no te sientes a gusto llevándolo puesto.