En la actualidad ha aumentado el interés de las familias por tener mascotas en su hogar, lo anterior teniendo en cuenta la conexión emocional y el bienestar que produce el acompañamiento de estos seres vivos.
El imaginario que las mascotas solo eran animales de compañía para niños, adultos mayores o personas con alguna condición médica, está quedando atrás. Cada vez son más las personas que buscan tener en su casa a ese ser que les produce estabilidad emocional, bienestar físico y mental.
Por esta razón, a continuación exploraremos por qué es importante tener una mascota en nuestro hogar.
Bien sea con un perro, un gato, un conejo o la especie que decidas tener como mascota, se genera un vínculo emocional bastante fuerte, que permite crear lazos afectivos sinceros y profundos.
Estudios han demostrado que la presencia de mascotas en el hogar producen sensación de consuelo y seguridad a los integrantes de esa familia. Además, compartir con estos animales se producen resultados muy positivos para la salud mental de las personas, al reducir notablemente los niveles de estrés o ansiedad.
Acariciar a tu mascota provoca que se liberen endorfinas, que son las hormonas responsables de hacernos sentir bien, emocional y físicamente.
Los perros son los principales causantes de este beneficio. Normalmente los caninos necesitan salir al parque a caminar o a hacer sus necesidades, llevando esto a que sus dueños deban salir a caminar, correr o incluso jugar, para dedicarle tiempo a su mascota. Actividad física que también beneficia a la persona, pues le permite tener un momento diferente en medio de su cotidianidad.
Salir a caminar con tu perro te permitirá reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, te permite mejorar la circulación y tener un día a día más activo.
Ahora bien, el papel que juega tu mascota en tu salud mental es poderoso, pues se ha podido demostrar que su compañía reduce los niveles de depresión y ansiedad. Compartir con un animal ayuda a sacar de nuestra mente pensamientos negativos, produciendo una sensación de bienestar.
Así mismo, establecer una rutina sobre el cuidado que debes tener con tu mascota, te permitirá organizar tus responsabilidad, tu tiempo.
Son muchos los padres de familia que regalan a sus hijos una mascota con el fin de educarlos en la importancia de la responsabilidad. De esta manera, los menores crecen aprendiendo a cuidar a un ser vivo, que necesita no solo de sus cuidados, sino también de su cariño y tiempo de calidad.
Sacarlos a pasear, bañarlos, tener todas sus vacunas al día, llevarlo al veterinario, son acciones que fomenta el sentido de compromiso en los niños, así como del trabajo en equipo, teniendo en cuenta que en muchas familias, esta mascota es responsabilidad de dos o tres menores.
Salir con tu mascota, en ocasiones, provoca que ese círculo de interacción diaria crezca. A menudo, nos encontramos en un parque o en el veterinario con dueños de otras mascotas, que poco a poco van generando algún tipo de relación con nosotros, compartiendo experiencias comunes.
En oportunidades, las mascotas llegan a ser ese «rompehielos» en diversas situaciones sociales, permitiendo con mayor facilidad entablar una conversación y tener nuevas amistades. Estudios han demostrado que las mascotas permiten fortalecer los lazos sociales de sus dueños.
En conclusión, tener una mascota siempre será una excelente opción, tanto para nuestra familia, como para nuestra salud física y mental.
Su tenencia permitirá fortalecer valores como la responsabilidad, la empatía y el respeto, permitiendo relaciones más auténticas entre los integrantes de cada familia.
Por esta razón, muchos expertos y veterinarios consideran que tener una mascota va más allá de una inversión en su cuidado, es también una inversión en nuestra felicidad y bienestar.